Lo que debes saber sobre el refinanciamiento de deudas

Lo que debes saber sobre el refinanciamiento de deudas

Crédito General

¿Te encuentras en una situación de sobreendeudamiento? El pago de tus deudas supera el 40% de tus ingresos mensuales, no alcanzas a cubrir las cuotas mensuales de pago de tus deudas, llevas meses en mora con tus acreedores, o pagas con las justas el mínimo de tus tarjetas de crédito; entonces, una decisión importante puede ser refinanciar tus deudas con tu institución financiera. Es un plan de acción que puede mejorar tu situación financiera actual, pero que requiere de compromiso, orden y control.

¿Qué es el refinanciamiento de deudas?

El refinanciamiento es una alternativa que ofrecen las entidades financieras a sus clientes, especialmente a aquellos que cayeron en mora, para salir de sus deudas de una manera más ordenada, reprogramando los pagos en cuotas fijas por un tiempo determinado.

Es un proceso en el que puedes solicitar un cambio de las condiciones de tu crédito a tu institución financiera, ya que te encuentras en una situación en la que no puedes cumplir con tu obligación.

Generalmente, al refinanciar tu crédito y cambiar las condiciones, puede que las cuotas de tu deuda sean más bajas, los plazos sean más largos y los intereses también crezcan. Sin embargo, es mejor que pagues poco a poco tus obligaciones a no cubrirlas y que crezcan debido a los intereses por mora y las comisiones por gestión de cobranza de las instituciones financieras.

¿Qué acciones debes tomar si decides refinanciar tus deudas?

Si tomas la decisión de solicitar un refinanciamiento de deudas, se recomienda que hagas varios ajustes en la administración de tus finanzas y de tus deudas, para que puedas cumplir con las nuevas condiciones que te otorgará la entidad financiera. Entre éstas están que dejes de usar tus tarjetas y no adquieras nuevas obligaciones financieras. Adicionalmente, se recomienda que identifiques cuál es tu capacidad real de pago (ingresos – gastos necesarios). Con esta información clara, podrás negociar las condiciones que se apeguen a tu realidad y llegar a un acuerdo con la entidad sobre plazos y cuotas más cómodas.

¿Qué condiciones solicitan las instituciones financieras para refinanciar tus deudas?

La Superintendencia de Bancos menciona que las condiciones de un refinanciamiento dependen exclusivamente de la entidad financiera. Sin embargo, como ejemplo, algunas entidades financieras te pueden pedir que, para refinanciar el préstamo, hayas cancelado por lo menos entre un 20% y 30% tu obligación. También pueden pedirte requisitos que te pidieron cuando se contrató el crédito, para identificar cuál es tu situación financiera actual y cuánto varió.

¿Cómo identificas cuánto es el monto real que puedes destinar mensualmente al pago de tus deudas?

Para conocer el monto real que podrás destinar al pago de tu deuda, debes realizar un presupuesto e identificar cuánto dinero necesitas para cubrir tus gastos fijos como alimentación, vivienda, servicios básicos y educación. El monto que quede libre de ese presupuesto es el que podrás destinar al pago de las cuotas de tu deuda refinanciada. Si deseas que el monto disponible sea más alto, es útil que analices en qué áreas puedes optimizar recursos y reducir tus gastos que no sean esenciales y fijos. Puedes utilizar la técnica PERC para identificar los gastos que puedes Postergar, Eliminar, Reducir y Conservar. Entre estos gastos pueden estar servicios de televisión por cable, suscripciones a gimnasios, revistas, comidas fueras de casa, compras de bienes de lujo, etc.

 

En conclusión, refinanciar algunas o todas sus deudas puede o no ser una buena idea, dependiendo de tu situación financiera actual. Haz un inventario detallado de tus deudas, saldos, tasas de interés, cuotas y pagos mínimos. Si puedes mejorar las condiciones de tus deudas de manera significativa, la refinanciación suele ser una gran opción. Además, si puedes reducir tus pagos mensuales, puedes hacer que el dinero que ahorres se utilice para pagar el capital más rápidamente o para ahorrar para el futuro.

 

Fuente:

El Comercio

Revista Líderes

Razones por las que no nos gusta hablar sobre el dinero

Razones por las que no nos gusta hablar sobre el dinero

General

Autora: Michelle Guerrero

Cuando tus padres te enseñaron los tips para mantener una conversación cortés, probablemente te recomendaron que evitaras ciertos temas de conversación, como la religión, la política y el dinero. Después de todo, hablar de dinero puede ser un tema difícil e incómodo, y ¿quién quiere estropear una buena cena?

¿Por qué tenemos miedo de hablar de dinero? A continuación, te explicamos por qué hablar sobre dinero es un tabú y qué puedes hacer para superar el miedo.

 

Quieres proteger tu estatus social

Permanecer en silencio acerca de cuánto dinero tenemos, ganamos y gastamos en realidad se basa en el instinto. El dinero está muy vinculado a nuestro estatus social. Nos gusta menospreciar la idea de que las personas intenten mostrar su estatus, pero es una característica humana arraigada.

La forma en como formamos nuestras relaciones tiene que ver con nuestro estatus, en los tiempos modernos a menudo está relacionado con la cantidad de dinero que tenemos.

 

Temes ser juzgado

Evitar hablar de dinero parece dar seguridad en situaciones sociales porque las personas sienten mucho nerviosismo acerca de cómo los percibirán los demás en función de cuánto dinero tienen.

Por lo tanto, somos muy conscientes de cómo otras personas podrían vernos debido a nuestro dinero. Esta es la razón por la cual es común que las personas se relacionen con otras personas con una posición económica similar: permite que las personas se relajen y se preocupen menos por ser juzgadas.

 

Ansiedad en torno al dinero

Tu falta de voluntad para hablar de dinero, ¿tiene relación con tu crianza?

El Dr. Brad Klontz, fundador del Financial Psycology Institute dice que si tus padres impulsaron la narrativa de que hablar sobre el dinero no era apropiado, es porque ellos mismos sintieron ansiedad en torno a él.

Klontz y su padre, Ted Klontz, también psicólogo financiero, identificaron cuatro categorías diferentes de guiones de dinero que pueden afectar el bienestar financiero de las personas:

  • Evasión al dinero: generalmente consideran al dinero como malo y a las personas ricas como codiciosas. A su vez, creen que no merecen dinero.
  • Idolatría al dinero: están convencidos de que el dinero resolverá todos sus problemas y que nunca podrán tener suficiente dinero, ya que el dinero es lo que les proporciona poder y felicidad.
  • Nivel social del dinero: sienten que su autoestima está determinada por lo que tienen, lo que les lleva a la presión de hacer compras costosas.
  • Vigilancia del dinero: tienden a centrarse en el ahorro, ser discretos sobre sus ingresos y preocuparse por tener suficiente dinero para cubrir los costos de emergencia. Las personas que se encuentran en esta categoría no necesariamente tienen problemas financieros, pero tienden a ser demasiado cautelosos y les cuesta disfrutar de los beneficios y la sensación de seguridad que brinda su dinero.

 

¿Cómo empezar a hablar de dinero por primera vez?

Si nunca has hablado abiertamente sobre tus finanzas, ¿cómo puedes dejar de lado tus ansiedades y comenzar?

 

Sé transparente sobre tus objetivos: Es importante aclarar por qué estás recaudando dinero, ya sea que estés conversando con un amigo, familiar, cónyuge o compañero de trabajo. De esta manera, ellos entenderán cuáles son tus intenciones.

Por ejemplo, quizás la razón por la que desees comenzar a hablar sobre el dinero con tu pareja es porque ven un futuro juntos y quieren estar en la misma página con sus objetivos. O si deseas hablar sobre el sueldo con un compañero de trabajo, explícale que es porque simplemente quieres saber si te pagan justamente; en ese caso, compartir lo que ganas primero y preguntar si eso parece justo puede ser una ruta más diplomática.

 

Comienza pidiendo consejos: Pedir consejos siempre es una forma segura de abordar los temas de dinero. Es una forma menos intimidante de abordar el tema, y ​​es probable que la persona con la que te acerques se sienta halagada.

Por ejemplo, si quieres consejos sobre dinero de alguien mayor que tú, Klontz sugiere preguntar: “¿Qué consejo le darías a alguien de mi edad que quiere tener éxito financiero?” O, en términos más generales, puedes decir: “Puede ser un poco extraño, pero tengo algunas preguntas relacionadas con mi vida financiera”.

Pedir consejos hace que sea más probable que tu compañero de conversación esté emocionado de compartir sus opiniones y esté más dispuesto a bajar la guardia.

 

Crea un guión: Si estás realmente nervioso, Klontz recomienda crear un guion corto que puedas usar para calmar tus nervios, incluye cómo deseas abordar el tema. Es muy probable que, si explicas con claridad y sinceridad lo que estás buscando, y comprendes que no todos pueden estar dispuestos a compartir sus propios datos personales, las personas cercanas a ti deberían estar felices de proporcionar cualquier información que puedan.

 

Fuente: Northwestern Mutual

 

 

Consejos para manejar la incertidumbre financiera

Consejos para manejar la incertidumbre financiera

General Planificación y Presupuesto

Autora: Michelle Guerrero

El nuevo coronavirus nos está afectando a casi todos de alguna manera. A medida que el distanciamiento social se hace realidad, también debemos prestar atención al efecto que podría tener en nuestra salud financiera.

 

Los médicos creen que las medidas agresivas de distanciamiento social pueden ayudar a retrasar la propagación del virus para que podamos volver a la normalidad cuanto antes. Mientras te concentras en tomar medidas para proteger tu salud, aquí hay cinco consejos para superar la incertidumbre financiera.

 

  1. Revisa tu presupuesto

Algunos de nosotros llevaremos nuestras laptops a casa y continuaremos trabajando. Pero si eres un trabajador por hora, contratista o dueño de un negocio, los efectos financieros pueden ser más pronunciados.

Independientemente de si gastas menos, es probable que tu presupuesto cambie en las próximas semanas. Ahora es un buen momento para prestar más atención a tu flujo de caja y ajustar sobre la marcha.

Si te encuentras en una situación en la que ganas menos, puede haber situaciones en donde puedes recortar tu presupuesto. Naturalmente, esto incluirá gastar menos en las salidas. Pero si aún necesitas efectivo adicional, observa cualquier gasto que puedas recortar temporalmente. Además, también podrías considerar diferir otros tipos de gastos, como cualquier dinero extra destinado a pagar tus deudas, y que superen el pago mínimo.

  1. Fondo de emergencia

El fondo de emergencia es una parte crítica de la planificación financiera. Si cuentas con un fondo de emergencia en una cuenta de ahorros, este es el momento de usar estos fondos si necesitas dinero para llegar a fin de mes.

Si aún no has creado un fondo de emergencia, o no crees que hay suficiente en el tuyo para cubrir tus necesidades en las próximas semanas, también está bien. Aún tienes opciones:

  • Seguro de vida: Si tienes una póliza de seguro de vida que tiene un valor acumulado en efectivo, generalmente puedes acceder a este dinero de manera relativamente rápida y fácil. La mayoría de las veces, la mejor manera de hacerlo es tomar un préstamo contra tu póliza de la compañía de seguros.
  • Líneas de crédito: Si tienes una línea de crédito abierta, como tus tarjetas de crédito, verifica tu límite de crédito y la tasa de interés. Este es un lugar fácil para obtener dinero rápidamente. Pero es una buena idea sacar dinero de las cuentas con la tasa de interés más baja y luego pasar a la siguiente más baja, y así sucesivamente.
  1. Refinancia tu deuda

Si tienes una hipoteca, un préstamo estudiantil u otra deuda, y te encuentras en una situación en la que no vas a poder cubrir la cuota mensual, considera la refinanciación. La refinanciación generalmente puede llevar semanas o incluso meses en completarse. Pero si puedes reducir tu pago mensual a largo plazo, puede valer la pena.

Podrías usar este dinero extra en tu flujo de caja mensual para reponer tu fondo de emergencia, o para pagar cualquier préstamo nuevo o deuda de crédito que asumiste para llegar a fin de mes.

  1. Ayuda a tu comunidad

Si tus ingresos no se verán afectados en las próximas semanas, asegúrate de gastar parte de tu dinero para ayudar a aquellos cuyos ingresos podrían verse afectados. Tal vez esto signifique pedir comida a domicilio, reservar un viaje en el futuro o comprar en tiendas locales. La seguridad debe ser tu principal prioridad, pero gastar tu dinero en estableciemientos y actividades locales puede ser una forma de ayudar a tu comunidad.

  1. Revisa o comienza tu plan financiero

Si tienes un plan financiero, una vez que superemos esta situación, será una buena idea revisar tu estrategia para ver si necesita algunas actualizaciones; tal vez destinar una parte de tu dinero para volver a construir tu fondo de emergencia.

La planificación financiera para tus objetivos y para los riesgos que pueden interponerse en el camino, puede ser muy útil para que estés preparado para enfrentar una crisis como esta en el futuro.

 

Fuente: Northwestern Mutual

Formas de evitar caer en deudas con la tarjeta de crédito

Formas de evitar caer en deudas con la tarjeta de crédito

Crédito General

Autora: Michelle Guerrero

Es fácil endeudarse con la tarjeta de crédito, gastas un poco aquí, un poco allá y no te das cuenta de que en realidad tus gastos suman un gran monto de dinero; y caes en una deuda que dependiendo de su magnitud puede ser difícil recuperarte. Incluso puedes estar cometiendo algunos errores que desconoces, por lo que estos trucos te ayudarán a evitar caer en deudas con tu tarjeta de crédito.

  1. Enfrenta las cosas fáciles primero

Puedes utilizar el método “bola de nieve”, la forma en como este método funciona es que primero pagas la tarjeta con el saldo más alto y luego pasas al siguiente más bajo, independientemente de sus tasas de interés.

Otra opción es enfocarte en la tarjeta con la tasa de interés más alta y pagarla primero. Esto te permite pagar una menor cantidad de interés.

Si tienes deudas en dos tarjetas, estarás más inclinado a pagar un porcentaje fijo (por ejemplo, 30 por ciento) en ambas tarjetas, pero no se aconseja que pagues de esta forma; ya que tardarás más en pagar tu deuda y terminarás debiendo más intereses en el proceso.

  1. Da prioridad a ciertos gastos

Corres el riesgo de gastar de más en los buenos tiempos. Cuando algunas personas disfrutan de un aumento de autoestima al usar las redes sociales, tienen más probabilidades de caer en deudas de tarjetas de crédito. A menudo nos encontramos con problemas cuando los eventos conspiran a nuestro favor.

Para contrarrestar este efecto, considera comprar solo lo que necesitas para vivir durante un mes. Un beneficio de esto es que ahorrarás algo de dinero, el mismo que puedes destinar para pagar tus deudas de la tarjeta.

  1. Maneja adecuadamente tu tarjeta de crédito

Obtener dinero en efectivo de tu tarjeta de crédito es una de las causas principales para caer en deudas. Para evitar usar este dinero debes fijar un presupuesto y contar con un fondo de emergencia para anticipar cualquier evento inesperado que pueda ocurrir.

Asimismo, debes conocer la tasa de interés y cargos anuales de tu tarjeta, de esta forma estarás informado acerca de estos valores y tratarás de usar menos la misma.

Procura tener una o dos tarjetas como máximo para no caer en una deuda que al final no puedas pagar.

 

Fuente:

The New York Times

Prepárate emocionalmente para el retiro

Prepárate emocionalmente para el retiro

General

Autora: Michelle Guerrero

Durante años, has trabajado para ahorrar una parte de tus ingresos para prepararte para la jubilación. Pero ahora que te estás acercando a esta fase de la vida, es posible que te sientas ansioso por gastar lo que te llevó toda una vida construir.

A veces los mejores ahorradores son quienes tienen más dificultades para disfrutar de la jubilación. Has hecho números y te das cuenta de que puedes permitirte el estilo de vida que has planeado. Sin embargo, gastar tus ahorros es psicológicamente más difícil de lo que esperabas.

No estás solo. Pasar de una mentalidad de ahorro a una de gasto puede ser estresante. Esto se debe a que los grandes ahorradores están condicionados a retrasar la gratificación instantánea. Durante décadas, te has entrenado para ahorrar primero, y gastar después. Es difícil esperar que cambies tus hábitos el día después de jubilarte.

Para algunos, la preocupación e incluso el miedo juegan un papel importante. Lo desconocido, incluida la incertidumbre sobre cuánto tiempo vivirás, los cambios económicos futuros y los cambios en el cuidado de la salud, pueden hacerte sentir que nunca estás realmente preparado, incluso si lo estás.

Si tienes el desafío de cambiar tu mentalidad de trabajar y ahorrar a jubilarte y gastar, hay varias cosas que puedes hacer para facilitar la transición, disfrutar más y sentir menos estrés.

  1. Descubre qué pasión quieres seguir

Ahora que te jubilaste, tienes el tiempo y el dinero para gastar haciendo otras cosas. Aprende un nuevo idioma o instrumento, viaja o explora tu lado creativo o aventurero. ¿Las nuevas experiencias te dan alegría? Si estás ocupado haciendo algo que amas, tendrás menos tiempo para preocuparte.

  1. Ten un plan para vivir cómodamente al jubilarte

Planeamos la jubilación, pero no vivir en ella. La capacidad de gastar cómodamente en la jubilación se reduce a la confianza, y la confianza proviene de saber, lo que tienes y lo que necesitas. Aquí es donde un profesional financiero puede trabajar contigo para desarrollar un plan para identificar los ingresos que necesitas para pagar todas las cosas que planeas hacer en tu retiro. Tener un plan te ayudará a sentirte más seguro al gastar tu dinero y no estar tan preocupado por quedarte sin dinero.

  1. Distinguir las diferencias de gastar dinero

Si eres un buen ahorrador, probablemente no seas un comprador impulsivo. Considera tus ahorros de jubilación como una de las herramientas que tienes para explorar tus intereses y lograr las cosas que son importantes para ti. El presupuesto puede ayudarte a controlar tus preocupaciones y tomar decisiones informadas sobre en qué gastas tu dinero.

Fuente: Northwestern Mutual

Puntos para considerar cuando se acerca la jubilación

Puntos para considerar cuando se acerca la jubilación

General Planificación y Presupuesto

Has estado ahorrando diligentemente para la jubilación durante décadas, y ahora el último día de trabajo se acerca. A medida que empiezas a soñar con pasar los días de semana haciendo tu hobby favorito y los veranos viajando, también puedes empezar a preguntarte si deberías hacer algo diferente con tu dinero.

Cuando te faltan 10 años para jubilarte, normalmente es el momento de empezar a ser más preciso en cuanto a tus objetivos de ahorro y a la forma en que generarás ingresos una vez que dejes de recibir un cheque de pago del trabajo.

Mientras más cerca estés del retiro será más fácil hacer una evaluación completa de dónde estás y dónde estarás cuando te jubiles. Aquí hay algunas cosas que debes hacer al acercarte a la jubilación para asegurarte de que vas por buen camino.

  • CUANDO ESTÉS A 10 AÑOS DE LA JUBILACIÓN: HAZ CÁLCULOS…

Diez años antes de que te retires es un buen momento para empezar a profundizar en los detalles de tu plan de jubilación.

Cuenta todo, incluyendo cualquier pensión, planes de seguro, cuentas de inversión, inversiones en bienes raíces, cuentas bancarias, cuentas de ahorro para la salud e incluso los pagos esperados del Seguro Social. Haz una buena estimación de cuánto es probable que tengas cuando planees jubilarte y cuánto ingreso podrás generar de manera confiable.

Una vez que todo esté contado, es hora de construir tu presupuesto de jubilación. Aquí es donde puedes soñar con todas las cosas que quieres hacer en la jubilación. ¿Harás algunos viajes grandes durante el curso de tu retiro, o planeas hacer dos viajes al año? Empieza a pensar en lo que querrás gastar. ¿Los ingresos que generes te permitirán mantener la vida que quieres en tu jubilación?

Si las estimaciones de lo que tendrás y lo que necesitarás no coinciden, una década suele ser suficiente para hacer algunos cambios. Si tienes que recuperar algo de terreno, realmente tienes tres opciones: recortar gastos, trabajar más tiempo o buscar ganar más dinero. La mayoría de la gente hace una combinación de esas tres cosas.

  • ACTUALIZA TU TOLERANCIA AL RIESGO

A medida que te acerques a la jubilación, tus inversiones deben cambiar para protegerte contra épocas de vacas flacas que podrían poner en peligro tus ahorros para la jubilación.

Diez años antes de jubilarte es un buen momento para empezar a profundizar en los detalles de tu plan de jubilación.

Podrías considerar poner tus ahorros en una póliza a largo plazo o adquirir un bien inmueble para comenzar a percibir ingresos de otras fuentes que te ayudarán durante el retiro.

  • REPITE

A medida que te acercas a la jubilación, digamos, a cinco años, es hora de actualizar tu presupuesto de nuevo. En ese momento, tienes una idea bastante decente de cuánto vas a gastar cada año. Es importante empezar a revisar esos números regularmente y ver si serás capaz de tus gastos actuales.

  • PREPÁRATE PARA DISFRUTAR DEL SIGUIENTE CAPÍTULO

Cuando pasas tiempo preparando tus finanzas para la jubilación, puedes quitarte una gran preocupación de la mesa al acercarte el día en que dejas de trabajar. Sabrás cómo vas a pagarlo, así que lo único que te quedará es vivir la vida con todo el tiempo nuevo que tengas para disfrutarla.

 

Fuente: Northwestern Mutual

Comienza a planificar tu retiro soñado

Comienza a planificar tu retiro soñado

General Planificación y Presupuesto

Te has puesto a pensar, ¿cómo es el retiro de tus sueños? Es posible que tengas una idea de cómo quieres sentirte en la jubilación, es decir, menos estresado y libre de hacer todas las cosas para las que no tuviste tiempo mientras trabajabas, pero esas son todavía nociones vagas. Y cuanto más te acerques a la jubilación, más detallada debe ser tu visión; de esa manera, podrás saber mejor si estás en camino de lograrlo.

Por lo tanto, si nunca te has tomado el tiempo de pensar en cómo te gustaría jubilarte, nunca es demasiado tarde para empezar. Esta lista te puede ayudar.

  1. IMAGINA TU JUBILACIÓN

Es muy posible que, por todas tus ocupaciones, apenas puedes encontrar tiempo para planear tus próximas vacaciones, por lo que ni siquiera habrás pensado en tu retiro. Si tienes problemas para afinar tu visión, usa un método para conocer lo que realmente quisieras con las siguientes preguntas:

  • ¿Quién compartirá tu jubilación contigo? ¿Estás planeando la jubilación solo para ti, o con un cónyuge o pareja? Si estás planeando con dos personas en mente, pregúntale a tu pareja cómo es el retiro de sus sueños. Cuanto más cerca estés de la jubilación, más importante es averiguar sus diferencias.
  • ¿Qué quieres hacer en tu tiempo libre? Puede que ya estés soñando despierto con viajar a lugares exóticos, cultivar tu jardín o empezar un nuevo trabajo complementario. Piensa en cómo pasas tu tiempo libre ahora. ¿Quieres tener la libertad de hacer más de lo mismo o quieres buscar nuevas aventuras? ¿Tus actividades serán locales o te llevarán alrededor del mundo?
  • ¿Dónde quieres vivir? Tal vez sueñas con envejecer en tu casa actual, o quieres reducir el tamaño a una casa más pequeña ahora que todos los hijos están fuera del nido. Tal vez la idea de residir en una comunidad de jubilados con actividades en el lugar te atraiga, o te intriga la idea de mudarte al extranjero. Es importante pensar en esto porque el lugar donde vives dictará muchos de tus costos de vida diarios.
  • ¿Cuándo quieres jubilarte? Por supuesto, el momento en que decidas jubilarte no depende necesariamente de ti; los cambios en el trabajo o en tu salud pueden hacer que te jubiles antes de lo previsto. Pero en una situación ideal, ¿cuándo querrías jubilarte? ¿Quieres empezar antes para poder empezar la siguiente fase de tu vida – o prevés trabajar hasta los 70 años o más?
  • ¿Por qué quieres retirarte? Esto puede parecer algo obvio, pero tal vez no busques retirarte en el sentido tradicional. No todo el mundo está emocionalmente preparado para decir adiós a su trabajo y al sentido de propósito que proporciona. Si eso suena a ti, puedes imaginarte tu jubilación no como una parada difícil y más una transición, en la que pasas de trabajar a tiempo completo a tiempo parcial, o de trabajar en una carrera de larga duración a perseguir una nueva pasión.

Cuanto más detallado sea el plan que tengas, mejor podrás formar una verdadera estrategia para la jubilación.

  1. CÓMO PUEDES AYUDAR A QUE ESTO SUCEDA

Una vez que tengas una idea de cómo es tu retiro, es hora de un pequeño chequeo de la realidad del retiro: ¿Tienes un plan para llegar allí? Es común ahorrar y esperar que estés haciendo lo suficiente, pero una verdadera estrategia de jubilación va más allá del ahorro.

Trabajar con un asesor financiero puede ayudarte. Pueden realizar algunas cifras para que determines si estás en camino de mantener el estilo de vida de jubilación que deseas, y ayudarte a evaluar tus opciones si necesitas ponerte al día.

Basándote en tu visión de la jubilación, puedes discutir cuánto necesitarás presupuestar para cubrir tanto los costos discrecionales como los gastos necesarios, como la vivienda y la atención médica. Un asesor también puede elaborar un plan que incluya diversas fuentes de ingresos para la jubilación, como beneficios del Seguro Social, fondos de inversión, anualidades y seguros de vida. El objetivo es ayudar a que tu dinero dure en la jubilación de la manera más eficiente posible.

Por supuesto, tus sueños de jubilación pueden y probablemente cambiarán a través de los años. Un asesor financiero puede ayudarte a proporcionarte una guía sobre cómo evaluar y ajustar tu cartera y fuentes de ingresos si tus objetivos cambian. Con algunas decisiones financieras inteligentes, podrás asegurar que lo que sueñas se haga realidad.

 

Fuente: Northwestern Mutual

El Seguro de Depósitos: Un mecanismo de protección financiera

El Seguro de Depósitos: Un mecanismo de protección financiera

General Sistema Financiero

¿Qué es el Seguro de Depósitos?

El Seguro de Depósitos es un mecanismo de seguridad financiera que protege hasta por un monto de cobertura los depósitos efectuados en las entidades financieras, en caso de que sean declaradas en liquidación forzosa. Estas entidades son bancos, mutualistas y cooperativas de ahorro y crédito, autorizadas por la Superintendencia de Bancos o la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria.

¿Qué protege el Seguro de Depósitos?

Están protegidos los depósitos en cuentas corrientes, de ahorros, depósitos a plazo fijo u otras modalidades legalmente aceptadas.

¿Qué no protege el Seguro de Depósitos?

  • Los depósitos efectuados por personas vinculadas directa o indirectamente a la entidad financiera.
  • El exceso del monto protegido.
  • Los depósitos en la misma entidad de los accionistas, administradores y miembros del consejo de vigilancia de una entidad financiera.
  • Los depósitos en oficinas del exterior.
  • El papel comercial y las obligaciones emitidas por las entidades financieras.
  • Las inversiones que se realicen en sociedades mercantiles.

¿Cuál es el monto de cobertura del Seguro de Depósitos?

Los depósitos efectuados en una entidad financiera (banco),  están protegidos hasta por el monto de cobertura establecido por la ley, es decir, hasta treinta y dos mil dólares de los Estados Unidos de América (US$32.000). Este valor está vigente a partir del 12 de septiembre de 2014, según lo dispuesto en el Código Orgánico Monetario y Financiero publicado en el Registro Oficial Suplemento 332 de 12 de septiembre de 2014.

Para mayor información sobre la cobertura, exclusiones y pago del Seguro de Depósitos visite: www.cosede.gob.ec

 

CONOZCA MÁS SOBRE EL SEGURO DE DEPÓSITOS:

Guía para que un millenial considere su fondo de retiro

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Ahorro General

Autora: Michelle Guerrero

En este punto de tu vida, la jubilación probablemente esté tan lejos que es difícil pensar en eso.
Después de todo, tienes mucho que lograr mientras tanto. Hay préstamos estudiantiles que debes pagar, para empezar. Pero también hay países para visitar, una carrera para crecer, una casa para comprar y tal vez una familia para comenzar. En serio, es bastante difícil planificar para la próxima semana, y mucho menos dentro de 30 o 40 años a partir de ahora (especialmente cuando estás ahorrando para el pago inicial de una casa).
Pero dar a la jubilación un poco de espacio mental hoy, puede dar buenos resultados para tu futuro. Eso se debe a la belleza del interés compuesto. Básicamente, $100 ahorrados hoy valdrán mucho más en la jubilación que $100 que ahorres dentro de 10 años. Entonces, para comenzar a ahorrar de inmediato, aquí te dejamos una guía para que planifiques para tu jubilación.

  • Ahorra para tu jubilación
    En Ecuador, todas las personas que aportan al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) tienen derecho al fondo de pensiones. Puedes acumular tus fondos de reserva, lo cual representa la doceava parte o el 8,33% de tu sueldo. Las personas que ahorran estos fondos reciben una tasa de interés del 6,75%.
    Sin embargo, para retirar estos fondos y los intereses ganados, las personas afiliadas deben tener mínimo 36 aportaciones acumuladas.
    A medida que aumente tu salario, puedes destinar un mayor monto de ahorro para tu jubilación. Sin embargo, no te confíes de los fondos que esperas recibir por pensiones del estado, es bueno tener una combinación de ahorros, para que nunca te falte dinero y puedas disfrutar tus últimos días.
  • Paga tus deudas estratégicamente
    Si tienes una deuda (y la mayoría de nosotros las tenemos), puede parecer un peso que te impide alcanzar tus otras metas. Crea un plan para deshacerte de las mismas. Eso significa pagar estratégicamente un poco más que el mínimo cada mes. Sigue así mes tras mes, y es como un interés compuesto a la inversa: tu deuda se reduce cada vez más rápido con el mismo pago. A medida que tu deuda se reduzca, eventualmente tendrás más fondos disponibles para otros objetivos, como ahorrar para tu jubilación, o incluso para viajar.
    Una forma de seguir tu plan de pago estratégico es automatizar tus pagos para que no gastes este dinero en otras actividades.
  • Construye tu red de seguridad
    Una vez que comiences a pagar tus deudas, contribuyas al fondo de pensiones y separes un fondo aparte para tu retiro, puede ser fácil sentir que estás listo para la jubilación. Y si la vida va exactamente como lo planeaste, probablemente estés bien encaminado. Pero la vida puede ser impredecible. Un accidente automovilístico, la pérdida de trabajo o tal vez un susto de salud pueden desviar fácilmente tus ahorros de jubilación.
    Para evitar usar tus ahorros de jubilación, asegúrate de tener seguro de salud, de auto y de vivienda.
  • Disfruta el presente
    Cuando tienes muchas prioridades financieras, puede parecer que no puedes gastar dinero en ti mismo hoy. Pero la planificación financiera y el ahorro para la jubilación no se trata solo de un objetivo lejano. Se trata de equilibrar esos objetivos a largo plazo con las cosas que quieres hoy. Por lo tanto, cuando estés presupuestando lo que contribuirás a tu jubilación, deuda y otros pagos, asegúrate de reservar algo de dinero para divertirte hoy.

Fuente: El Comercio
Northwestern Mutual

¿Cómo recuperarte cuando tu presupuesto de fiestas está en negativo?

¿Cómo recuperarte cuando tu presupuesto de fiestas está en negativo?

General Planificación y Presupuesto

Autora: Michelle Guerrero

Durante las festividades de navidad y fin de año, la mayoría de las personas tienden a gastar más dinero del que ganan; lo cual les lleva a sentirse presionados al momento de pagar sus tarjetas. De acuerdo con la psicología, el hecho de gastar puede implicar una liberación de dopamina, lo que te hace sentir bien.

Cualquiera sea tu razón para gastar, aquí encontrarás un plan que te ayudará a encaminar tus gastos.

Paso 1: Enfrenta el daño

Observar tus gastos te ofrece la oportunidad de asumir tu responsabilidad y descubrir por qué gastaste en exceso, para evitar que esta conducta se repita.

Las personas gastamos de más para satisfacer una necesidad emocional; pero comprar no te ayuda a llenar un vacío emocional.

Una vez que identifiques cuánto has gastado, puedes sentirte orgulloso de ti; puesto que estás tomando las riendas de tu camino para gastar menos.

Paso 2: Determina lo que necesitas

Ya sabes cuánto has gastado, así que ahora, haz una lista de los gastos que aún tienes que pagar.

Haz una lluvia de ideas sobre formas de cubrir tus actividades pendientes sin tener que gastar más. En lugar de comprar ropa nueva para un evento, utiliza la ropa que ya tienes. Si estás organizando una fiesta, conviértela en un evento más pequeño, como un almuerzo o cócteles.

En cuanto a los regalos, confía en algunos trucos mentales. Preséntate en el centro comercial con una lista e intenta no quedarte demasiado tiempo. Después de aproximadamente 90 minutos, las personas se vuelven más propensas a comprar cosas.

Cuando compres artículos en línea, deja los artículos en tu carrito por al menos 24 horas antes de realizar alguna compra. La primera vez que ves un nuevo artículo, vas a sentir mucha emoción y ganas de comprar, pero la segunda vez que ves los artículos, vas a perder el interés. La parte más racional de tu cerebro se activa después de 24 horas.

Paso 3: Cambia el tipo de regalos

Si tu presupuesto para la época de fiestas se acabó, es hora de ser creativo. En lugar de un regalo físico, busca experiencias, como una clase de cocina si sabes cómo hornear o ayudar a un pariente mayor a aprender a usar la tecnología.

Piensa en ello como una forma de establecer nuevas tradiciones. Si tu grupo de amigos generalmente visita un elegante restaurante o concierto, sugiere que este año, todos se reúnan para una actividad de servicio, como envolver regalos para alguna fundación benéfica.

Paso 4: Mejora el próximo año

Mejorarás tus técnicas de compra el próximo año, pero no tienes que esperar un año entero para intentarlo de nuevo. Durante los cumpleaños, la temporada de graduaciones, bodas y más, piensa en las consecuencias a largo plazo de continuar gastando de más.

Considera crear una cuenta de ahorros solo para gastos de vacaciones o solo gastos que surjan varias veces al año, para que ya cuentes con un dinero guardado para la próxima vez que celebres una fiesta. Para hacer esto, calcula cuánto gastas típicamente en este tipo de actividades sociales y luego divídelo en cantidades mensuales manejables que puedas ahorrar. El objetivo es tener suficiente para que en diciembre próximo, tus gastos por las fiestas ya estén pagados.

Fuente: Northwestern Mutual